La moda de invierno nos obliga a utilizar tejidos técnicos y anoraks de plumas no sólo durante la clásica semana blanca en la montaña sino también en la ciudad. Lo que antes era una prenda que se utilizaba esporádicamente – el anorak aguatado – hoy en día puede ser una prenda que usamos para ir al trabajo o en nuestro tiempo libre todos los días, durante buena parte del invierno. Cómodos y súper calientes, diseñados en mil versiones que pueden personalizarse entre las que elegir la más adecuada a nuestros gustos (desde el simple anorak al súper aguatado estilo Michelin) el “anorak de plumas” está viviendo una temporada perfecta y larguísima. La contaminación y la lluvia sucia hacen indispensable el lavado frecuente, para tener siempre prendas limpias y, sobre todo, brillantes, con sus llamativos colores. El lavado – ¿en casa o en la tintorería? Como todas las prendas especiales, podríamos pensar que el mono de esquí y el anorak de plumas deberían limpiarse en la tintorería. Pues es exactamente lo contrario, ya que estas prendas aguatadas no pueden limpiarse en seco (los disolventes utilizados pueden eliminar los tratamientos impermeabilizadores de los tejidos). Por tanto, el lavado en casa, rigurosamente con agua fría, es lo mejor. El único problema: hay que tener una lavadora grande, lo bastante para contener un anorak de plumas o un mono de esquí sin cargar el tambor más de la mitad. Si no es posible, lo mejor es ir a una lavandería de fichas, lavando las prendas siempre con agua fría y nunca en seco.
Para un resultado perfecto es mejor lavar una prenda cada vez (a menos que no sean muy pequeñas). El tambor deberá cargarse solo hasta la mitad para permitir un lavado más profundo pero, sobre todo, un aclarado eficaz. Los monos y tejidos técnicos están protegidos con sustancias impermeabilizadoras que necesitan mucha agua para aclararse bien y eliminar el jabón: si no existe esta posibilidad, casi seguramente se encontrará con una colada con estrías o huellas. Una vez cargada la lavadora, elija el detergente correcto.
Evite usar detergentes con blanqueadores ópticos, que podrían alterar los bonitos colores de sus prendas nuevas. No utilice detergentes con enzimas, que estropean la pluma o los aguatados naturales en el interior del mono (como el resto de fibras de origen animal, también las plumas se estropean si se lavan con detergentes con enzimas). Evite también añadir suavizante o perfume para la ropa de casa: no pueden penetrar en las fibras a causa del tratamiento antiagua, por tanto, dejarían solo antiestéticas huellas sobre la superficie, o bien, manchas o zonas ligeramente untosas.
El detergente perfecto creado por Nuncas para lavar a máquina con seguridad este tipo de prendas es Sportswear Detergente Específico, un detergente líquido que limpia a fondo respetando los tejidos tratados. Es suficiente verdaderamente poco y es eficaz incluso en frío. Una vez dosificado el detergente, elija un programa de lavado que pueda excluir o reducir el centrifugado. 500-600 giros son más que suficientes, ya que estos tejidos no pueden plancharse y un centrifugado excesivo crearía pliegues difíciles de estirar, además de aplastar demasiado el aguatado. Por último: el secado. Puede empezar con un secado con la secadora y un programa delicado, pero hay que finalizar tendiendo la prenda al aire libre y sacudiéndola bien para hinchar la pluma en su interior – incluso un par de veces durante el periodo de secado. Deje la prenda tendida al aire incluso un día entero si es necesario: si el interior no se seca perfectamente, se creará un olor desagradable que deberá eliminarse con otro lavado. Ahora, el mono o el anorak de plumas tienen un nuevo aspecto: listos para sacarlos fuera y combatir las inclemencias del tiempo.