Grandes ventanas – en el campo o en la ciudad – paredes divisorias de cristal o accesorios de cristal para muebles modernos, que subrayan la belleza de la decoración contemporánea. La transparencia es un elemento crucial en el peso específico del living moderno, mantenerla limpia y sin huellas, a veces, para algunos, puede ser complicado.
En realidad son suficientes pocas nociones básicas, el producto adecuado y una técnica comprobada aplicada de rutina para conseguir mantener limpios y esplendentes vidrios y cristales en toda la casa, sin demasiados esfuerzos.
Ante todo, es necesario distinguir el tipo de superficie a tratar y la suciedad que se deposita en la misma: una ventana grande que da al mar o a la ciudad y una vitrinita en un mueble o una pequeña ventana no son iguales y deben limpiarse con productos y técnicas diferentes. Las ventanas están expuestas a dos tipos de suciedad: la interna, más fácil de limpiar, y la externa, que comprende también la contaminación, residuos de hollín y huellas dejadas por la lluvia. Lo primero que hay que hacer para proceder adecuadamente es olvidarse del tópico amoniaco o alcohol puro + papel de periódico. Existen métodos más modernos, eficaces y absolutamente menos cansados. Nuncas ha pensado en un producto específico para los cristales de la casa: Glasnet. Bien equilibrado, queda en el cristal el tiempo necesario para limpiarlo a fondo antes de evaporarse, extrayendo literalmente la suciedad de la superficie lisa y dejando que pueda ser capturada por le paño. Es suficiente pasarlo con un simple papel de cocina absorbente y – con poco esfuerzo – el cristal quedará limpio. Empiece protegiendo los suelos para evitar que puedan caer gotas, después empiece desde arriba y vaya bajando con movimientos circulares hasta el suelo. Recuerde que tiene que pasar bien por las esquinas, para tener un cristal verdaderamente transparente. Notará enseguida la diferencia, ya que Glasnetlimpia los cristales sin dejar huellas. Y sin necesidad de realizar enormes esfuerzos. Para el exterior de sus ventanas más grandes elija la eficacia de Glasnet Forte , que se come literalmente la suciedad y después extiende una película de protección contra la acumulación de contaminación y hollín típicos de las ciudades. En este caso extienda el producto con una esponjita húmeda, por toda la superficie. Se formará un polvito blanco residual (considere la idea de proteger el suelo si es necesario) que después será suficiente con “eliminarlo” con uno paño seco. También en este caso, empiece desde arriba y vaya bajando progresivamente hacia el suelo. Eliminando el polvito blanco dejará en el cristal una película de protección que previene las huellas dejadas por los dedos, hace que la lluvia se deslice sin dejar marcas antiestéticas de cal y mantiene su cristal limpio durante más tiempo.